Más que un simple sueño
Las noches siguientes volvieron a transcurrir de la misma manera, en todas era atormentado por terribles pesadillas que cada vez estaban dotadas de mayor realismo y que al final terminaban dejando alguna huella visible en su piel. A partir de este descubrimiento el terror nocturno se fue intensificando de tal forma que comenzó a cambiar drásticamente sus hábitos y su conducta; al principio optó por permanecer despierto por las noches y dormir durante el día pero esto no funcionó y ahora entraba en pánico de solo pensar en quedarse dormido. No le fue fácil permanecer 24 horas despierto, tuvo que mantenerse ocupado y beber una gran cantidad de café, aún asi fue inevitable que su cuerpo sucumbiera al cansancio y se internara casi sin darse cuenta en el mundo de Morfeo. Pero en esta ocasión no experimento un lirismo caótico plagado de miedo, angustia, dolor y desesperación, este sueño era distinto: Comenzó en un mar de frío y oscuridad, una misteriosa melodía aguda y metálica llegaba hasta